Concepto

Una ruta literaria es un tipo de viaje cultural que requiere el diseño de un itinerario para realizar un recorrido, breve o extenso, planificado en torno a un autor, un grupo de autores, una corriente estilística, uno o varios personajes literarios y una o varias obras de creación literaria de cualquier género –narrativa, poesía, drama, teatro, textos históricos, diarios, memorias, biografías, etc.–.

Las rutas literarias constituyen modalidades específicas de las prácticas turísticas vinculadas al patrimonio (heritage tourism) desarrolladas en lugares relacionados con los textos o la biografía de sus autores, imbricando la ficción en el mundo real. Algunos ejemplos clásicos de este turismo literario vinculan ciudades y autores, como Dublín y Joyce; Praga y Kafka; París y Victor Hugo; Madrid y Galdós o Baroja; Londres y Conan Doyle; La Habana y Carpentier; Hemingway y Cabrera Infante; Barcelona y Ruíz Zafón, Vázquez Montalbán o Marsé; y Baltimore y Anne Tyler, entre otros.

Entre los principales factores que intervienen en la configuración de una ruta literaria destacan: el espacio geográfico abarcado; la duración temporal prevista; el enfoque temático o centros de interés seleccionados y el tipo de público al que se destina. Algunos ejemplos de rutas acotadas en el espacio son Madrid, escenario de cafés y novelas; Cervantes en Alcalá de Henares; los hermanos Bécquer en el Moncayo o El Hereje de Miguel Delibes en Valladolid; por otro lado, ente las rutas extensas y prolongadas se encuentran Los caminos del Cid –que recorre Burgos, Soria, Zaragoza, Guadalajara, Teruel, Castellón y Valencia– o la Inglaterra de Jane Austen, que discurre por el sur de este país.

Los viajes literarios añaden valor a la experiencia lectora, pues propician la recreación de contextos emocionales a través de la conexión con los lugares, ambientes, épocas, gentes y costumbres que los escritores y las escritoras conocieron y que les sirvieron como fuente de inspiración.

Las rutas literarias pueden incluir uno o varios recorridos que muestran un amplio espectro de espacios urbanos o rurales como paisajes, jardines, localidades, casas natales, casas-museo, cementerios, barrios, calles, plazas, cafés, comercios, etc. que proporcionan contacto real con los mundos del autor y de sus obras, siguiendo el rastro y la estela de lo biográfico o lo literario. Así, la ruta genérica de Antonio Machado en Soria (http://www.antoniomachadoensoria.com/indexrutas.htm) abarca varios itinerarios concretos que recogen distintos acontecimientos de su vida y su obra en esta ciudad –como los denominados Nupcial, Espiritual, de San Saturio, Esperanza, Cura de Leonor y Alvargonzález– y recorren los lugares cuya visita se recomienda.

En su origen, las rutas literarias nacieron a finales del siglo XVIII, vinculadas a la literatura de viajes y el género epistolar, alcanzando una centuria después un gran esplendor, durante el Romanticismo y su exaltación de los lugares pintorescos y exóticos. Durante la segunda mitad del siglo XX, este tipo de viajes estuvo relacionado con las prácticas de turismo cultural vinculado al disfrute del patrimonio y su expansión corrió paralela al desarrollo del turismo de masas.

En la actualidad, el uso generalizado de los dispositivos móviles y de las tecnologías de la información, unido al desarrollo de herramientas muy precisas de software de posicionamiento y geolocalización, han incrementado notablemente la oferta de este tipo de viajes.

Junto con las rutas literarias, existe un amplio abanico de otras modalidades de viajes culturales orientados al disfrute artístico, como las rutas musicales –Sevilla, ciudad de la Ópera (http://www.visitasevilla.es/es/guias/ciudad-de-opera) que discurre por los emplazamientos de Fígaro, Don Juan, Carmen, La Favorita, María Padilla, etc. o el itinerario que recorre los lugares de la estancia del compositor ruso Mikhail Glinka en su viaje por España, que inspiraron algunas de sus obras posteriores– o las rutas cinematográficas –como la Ruta Almodovar (http://asocinepac.blogspot.com.es/p/ruta-cinematografica.html) que transcurre en la Comarca del Campo de Calatrava (Ciudad Real) y recorre su pueblo natal y  algunos de los escenarios de sus películas–

Análisis

La complejidad del fenómeno de las rutas literarias reside en que numerosos elementos del universo literario están asociados al patrimonio cultural material –enclaves físicos ligados a la biografía de los autores, casas-museo, ediciones de los textos, etc.– mientras que otros elementos están relacionados con el patrimonio cultural intangible, como las tradiciones, relatos orales, representaciones, etc.

Desde una perspectiva antropológica y sociológica, en la actualidad, el desarrollo de las rutas literarias está en conexión con la puesta en valor de elementos identitarios de los grupos sociales y con la patrimonialización de la memoria y la cultura inmaterial (Uccella, 2013).

Desde un enfoque socio-económico, hay que considerar que el patrimonio cultural constituye un recurso económico polivalente relacionado con los planes de desarrollo y dinamización turística de un territorio, la oferta de ocio, el diseño de paquetes turísticos, etc. En este sentido, a pujanza de este fenómeno también está relacionada con la capacidad de los textos literarios para generar recursos económicos, mediante procesos que pueden dar lugar a diferentes consumos turísticos, vinculados a determinados niveles culturales y poderes adquisitivos (Magadán y Rivas, 2012, p. 30).

Implicaciones

Las rutas literarias tienen gran valor como recurso educativo, de hecho existen programas de animación a la lectura financiados por organismos e instituciones públicas que convocan periódicamente la realización de estas actividades en los diferentes niveles educativos.

Así mismo, pueden dar lugar al desarrollo de proyectos de innovación pedagógica de carácter transversal, vinculados a varias materias y disciplinas y a la elaboración de materiales de uso didáctico, como guías bibliográficas, diarios de viajes, guías de lecturas, atlas literarios, reportajes gráficos, etc.

La metodología para la creación de una ruta comprende diferentes fases (Uccella, 2013, p. 87-102):

a) conocimiento y observación del territorio

b) búsqueda de bibliografía y recogida de los materiales necesarios (textos literarios, objetos, guías, piezas musicales, audiovisuales, etc.)

c) contactos con responsables (autoridades locales, gestores culturales, personal administrativos, etc.)

d) primera lectura rápida de todos los textos y elección de criterios a aplicar en el diseño de la ruta literaria

e) segunda lectura en profundidad y elección de los textos vinculados a cada punto de la ruta

f) preparación del mapa de la ruta

g) creación de textos conectores que constituyen el hilo narrativo que articula la ruta

h) revisión y prueba para verificar in situ la validez del diseño realizado

i) redacción final de los textos y documentos que sirven de base a la realización del viaje.

Referencias

Arana Palacios, Jesús (2013). Embarquen por la biblioteca. Una aproximación a los viajes literarios. Gijón: Trea. (Biblioteconomía y administración cultural; 255)

Bataller Catalá, Alexandre (2011). La ruta literaria como actividad universitaria vinculada al territorio y al patrimonio. Revista Asa-branca. Disponible desde: http://www.uv.es/asabranca/encontre/bataller.pdf. [Consultado: 16/03/2014].

Hernández Ramírez, Javier (2011). Los caminos del patrimonio. Rutas turísticas e itinerarios culturales. Pasos. Revista de turismo y patrimonio cultural 9(2) 225-236.

Magadán Díaz, Marta y Rivas García, Jesús (2012). Turismo literario. Oviedo: Septem.

Ucella, Francisca R. (2013). Manual de patrimonio literario. Espacios, casas-museo y rutas. Gijón: Trea. (Manuales de museística, patrimonio y turismo cultural; 15).

Fecha de ultima modificación: 2014-03-24